San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México
30 de septiembre de 2025
Boletín No. 08
La continuidad de la contrainsurgencia en Chiapas: despojo, creación de conflictos e incursión de fuerzas militares y estatales contra el EZLN
• Despojo del territorio en Belén, una nueva provocación en el marco de estrategias para acabar con la lucha por la vida y El Común.
Desde el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba) denunciamos las estrategias de cercamiento y despojo del territorio recuperado por la lucha del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), llevadas a cabo en el Poblado Autónomo Zapatista Belén, Región Campesina, perteneciente al Caracol 8 “La Luz que Resplandece al Mundo”, con sede en la comunidad Dolores Hidalgo (municipio oficial de Ocosingo, Chiapas).
La Asamblea de Colectivos de Gobiernos Autónomos Zapatistas (ACGAZ) -parte de las estructuras de los zapatistas que impulsan El Común- denunciaron ataques que iniciaron a partir del mes de abril, los cuales incluyeron, negación al diálogo, incursión y medición del territorio autónomo recuperado en 1994, amenazas, robo de cosechas, quema de dos casas, y despojo, perpetrado por un grupo de civiles junto con la policía municipal de Ocosingo, Policía Estatal, Delegado de Gobierno, Fiscalía General del Estado de Chiapas, y efectivos del Ejército mexicano.
El fin, convertir el territorio recuperado en tierra privada, lo que ha dejado al menos 13 personas desplazadas de manera forzada, todas Bases de Apoyo del EZLN, además de 40 campesinos no zapatistas, a quienes les quitaron la tierra que es su sustento alimenticio y trabajo, todos encargados del trabajo colectivo de la región y de la milpa Común.
Estos hechos no son aislados y constituyen una renovación de la estrategia de hostigamiento y agresión a territorio zapatista, a su proyecto político, y lucha por la vida, provocado por las fuerzas del Estado mexicano. Como en los tiempos del PRI, ahora disfrazado de 4T, es la segunda ocasión en este año que se han realizado incursiones de operativos conjuntos (Ejército mexicano y fuerzas estatales, entre ellas las Fuerzas de Reacción Inmediata Pakal) en territorio zapatista; el primero ocurrió el pasado 24 de abril en la comunidad de San Pedro Cotzilnam, municipio de Aldama, Chiapas, Región Autónoma Vicente Guerrero. Además de que se presentaron hechos de hostigamiento y vigilancia en abril de 2025 durante el Encuentro Zapatista (Rebel y Revel) Arte.
El despojo se da en el marco de la continuidad de la estrategia contrainsurgente, ahora haciendo uso del sistema de impartición de justicia para confrontar a los pueblos de Chiapas, en medio de un proceso de “restitución de tierras”, con el respaldo de la Secretaría de la Defensa Nacional, constituyendo una provocación y confrontación directa contra el EZLN, lo que pone en riesgo la vida e integridad de las personas que habitan el territorio.
La actual violencia política está acompañada de un profundo proceso de despojo para acabar de entregar el territorio de los pueblos y comunidades de Chiapas a los intereses que rodean los megaproyectos extractivistas, de infraestructura, turísticos y de industrias energéticas.
Este nuevo ataque viola los derechos colectivos de los pueblos, particularmente los artículos 1 y 2 de la Constitución mexicana. Así también viola el sistema de derechos humanos regional e internacional a los que México está suscrito, como son los artículos 13, 14 y 15 del Convenio 169 de la OIT sobre Derechos de los Pueblos Indígenas y Tribales; así como de la Declaraciones de la ONU y OEA sobre Derechos de los Pueblos indígenas en los artículos del 25 al 32, y 25 al 27, respectivamente, ambas declaraciones sostienen el respeto a la tierra y el territorio de los pueblos y bienes comunes. Así mismo, los Acuerdos de San Andrés que enmarca el territorio como columna vertebral de la existencia de los pueblos.
El Frayba, con ánimos de que el conflicto no escale y de detener las violaciones a derechos humanos, ha colocado toda la información con el gobierno estatal y federal, para que actúen bajo su responsabilidad de respetar el territorio zapatista con relación a las agresiones, amenazas y despojo que vienen de sus propios agentes estatales.
Exigimos se respete la integridad de las personas no zapatistas y de las Bases de Apoyo del EZLN, así como de sus Territorios donde se construye El Común y la No Propiedad. Hacemos un llamado a la solidaridad nacional e internacional a realizar acciones en defensa de la vida y el territorio.
Publicado originalmente en la página del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas: https://frayba.org.mx/boletin-8-ataque-belen-despojo-territorio-zapatista