En la mañana del 12 de octubre pasado, al conmemorarse los 528 años del inicio de la invasión de América, la Comunidad Otomí residente en la Ciudad de México tomó las instalaciones del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, INPI, en la Avenida México Coyoacán #343, en Xoco, sobre la misma cuadra de la Cineteca Nacional. En el pronunciamiento leído ese día definieron: “La toma es por la dignidad de nuestros pueblos”, contra el INPI como elefante blanco que no representa a los pueblos, en repudio a los ataques paramilitares contra las comunidades zapatistas y contra la guerra y asesinatos que se cometen contra las comunidades y pueblos del Congreso Nacional Indígena.
Esta Comunidad Otomí participa en el Concejo Indígena de Gobierno del Congreso Nacional Indígena, en 2018 fueron desalojados del edificio de la ex embajada de la República Española en Roma #18 en la Colonia Juárez, a un año del sismo de 2017 que ya les había dejado en condiciones más precarias. Desde esa fecha mantienen un plantón en la calle ahí donde quedaron tras el desalojo y donde han tenido que pasar a la intemperie lo que va de la pandemia de Covid-19.
En la toma cotidianamente están realizándose actividades culturales, foros, conferencias de prensa, transmisiones de radios libres y medios libres y es también un espacio para difundir las luchas de pueblos indígenas de otras geografías.
La toma además de tener una serie de reivindicaciones entre las que destaca la lucha por vivienda digna, está funcionando también como Centro de Acopio para la comunidad otomí, se están recibiendo víveres, leche para bebé, pañales, agua embotellada y enlatados.
A través de este fotorreportaje @piedrayfuego nos cuenta sobre la Toma del INPI en octubre del 2020.
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